hemos llegado casi en un suspiro al final del mes de enero...
Paso a paso, día a día, hemos
llegado casi en un suspiro al final del mes de enero. Así que, henos ya aquí ante los últimos dos
días del primer mes del año; el que inicia un nuevo período de tiempo en
nuestras vidas, el que nos adentra en los prolegómenos de un mundo nuevo por
descubrir, el que se nos aparece de pronto lleno de enigmas, el que más cuesta
arriba se nos hace en definitiva. Entre
otras cosas, por la consabida “cuesta de enero”, de marcada y arraigada
tradición en el sentir popular; y a la que se la intenta atajar o superar de la
mejor manera posible. Y ello cada año,
pues cada nuevo año vuelve a repetirse la situación.
Un mes, este de enero que,
aparte de la velocidad con la que transcurrieron sus días, lo que ha hecho que
en muchos lugares aún no se hayan podido retirar todos los adornos de la última
Navidad –dirán algunos-; nos dejó en el día a día acontecimientos de todo tipo,
que serán seguro difíciles de olvidar.
Como ese agotador rescate de
Julen, el niño que se cayó a un pozo en Málaga, que ha movido, ocupado y
preocupado al país entero durante casi dos semanas. Y que cada día nos
levantábamos con la esperanza de haber avanzado en positivo hacia su rescate;
pero que al final se produjo la peor de las noticias.
Porque en el aspecto político,
el escenario general no es que se haya movido demasiado, ni se haya aclarado,
ni tampoco tenga visos de despejarse en los próximos días –ya con el mes de
febrero marcando los tiempos-. Y es que
todo parece haber entrado en una especie de bucle de difícil salida, a juzgar
por los movimientos de unos y de otros, no conducentes de momento a una
escapatoria satisfactoria de la situación.
Y por si todo esto fuese poco,
con el invierno atacando de pleno en casi todos los flancos, y allegándonos una
muestra bastante amplia de los fenómenos atmosféricos que le son propios: agua,
nieve, nieblas, noches heladoras y madrugadas frías y congeladas en extremo,
sin que el sol hiciese acto de presencia en ningún momento. Y con los consiguientes catarros y gripes al
cabo de la calle, que tantos inconvenientes traen como consecuencia.
(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 30/01/2019)
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