miércoles, 26 de enero de 2022

Trabajos diferentes

 


A veces, nos metemos tanto en la rutina del día a día, con las horas de trabajo acordadas, las horas de descanso posteriores y las horas restantes de sueño en una sucesión normal de los acontecimientos, que no nos paramos a pensar en las personas que, en sus trabajos, vienen obligadas a realizar por ejemplo turnos –sobre todo de noche-; con lo que las otras partes del día, digamos el tiempo de descanso y el de sueño, quedan trastocadas por completo. 


Y aunque hablemos de los mismos trabajos, al ejecutarse en diferentes horarios y en circunstancias desiguales de la persona, pueden resultar a priori distintos a la hora de realizarlos.


Aquí podríamos incluir a una amplia serie de colectivos a los que afectaría, desde los sanitarios a las fuerzas de orden público, pasando por los trabajadores de grandes empresas con tres turnos de trabajo, los vigilantes, los transportistas, los maquinistas de tren…, con turno de noche específico por su respectiva profesión; mientras que a esas horas el resto se recoge en sus casas para el período de descanso y del reparador sueño; todo ello dentro de una progresión lógica de los acontecimientos.


Aunque luego, habrá entre esas personas aquellas que, por la fuerza de la costumbre o porque saben que la profesión que eligieron así lo requiere, que llevarán a las mil maravillas realizar sus tareas laborales en la noche; cuando de otra parte, habrá seguramente un buen número de ciudadanos que lo verían de difícil realización para ellos, pues están convencidos de que la noche, de manera general, se hizo para descansar.


Y es que, de entrada y a título ilustrativo, resultará muy diferente patrullar por la ciudad –en referencia a las fuerzas de orden público-, en jornada de mañana o de tarde, con las calles llenas de gente y con la actividad laboral viva y en plena efervescencia, que hacerlo durante la noche en la soledad de las calles y con un silencio extremo en todos los lugares de la misma.

Porque claro, alguien tiene que estar despierto y velando por el resto en la noche, mientras los demás descansan cara a la jornada siguiente; como durante la mili el turno de imaginarias.  


(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 26/01/2022)



 

 


miércoles, 19 de enero de 2022

Enero, el primero

 

                                                                        Foto(Internet)


Pues, por aquello de entre unas cosas y otras, y corre que te pillo, somos ya sabedores de que hemos pasado el ecuador del mes de enero; y que estamos subiendo la cuesta de ídem y con más bien poco dinero en la cartera tras los dispendios de las pasadas fiestas navideñas.


Más o menos como otros años por estas fechas, pudiera decirse.  De ahí que la llegada del período de rebajas le viene que ni pintado al panorama de la economía doméstica.  Luego, además, de las subidas de los precios en muchos productos de la cesta de la compra, tasas municipales o servicios de uso diario; por no hablar ya de la factura de la luz, que anda disparada y hacia arriba un día sí y otro también.


Claro que, cuando hemos dicho “como otros años…”, la realidad sería que el hecho no es cierto del todo.  Porque otros años –aparte de estos dos últimos- no teníamos encima de nosotros ninguna pandemia que nos condicionase la vida en el día a día y nos obligase a programar nuestras actividades pensando en el coronavirus de marras, sino que el mes de enero venía marcado casi en exclusiva por la típica cuesta de enero que, a base de pundonor, alguna que otra carencia y con la ayuda de las clásicas rebajas comerciales, lográbamos superar allá avanzado el mes de febrero.  Y así lo contábamos tan campantes.


Pero hete aquí que, por culpa de este virus que nos trae a mal traer, este enero, para subir y doblegar su empinada cuesta, no vamos a poner nuestras esperanzas en exclusiva en las rebajas comerciales; sino en el trabajo ejemplar de nuestros profesionales de la salud y sanitarios en general, en nuestros investigadores y hombres de ciencia, en las organizaciones y voluntarios que colaboran con los anteriores; y muy mucho, en la responsabilidad de todos y cada uno de nosotros a la hora de cumplir escrupulosamente las normas sanitarias establecidas para combatir esta pandemia, entre ellas la consabida vacunación.


Merece la pena un último esfuerzo y atender al pie de la letra las recomendaciones y medidas establecidas por las autoridades sanitarias al respecto, ahora que ha surgido un pequeño haz de luz, justo con la llegada en masa de esta variante del ómicron.

 

 (Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 19/01/2022)

miércoles, 12 de enero de 2022

Tras la Navidad

 


Pues no, no han sido estas navidades pasadas un dechado de paz, armonía y alegría por doquier precisamente, como cabía esperar y así teníamos puestas grandes dosis de esperanza para que las mismas se desarrollasen por esos derroteros, quizás con pequeñas oscilaciones, pero nunca como al final han transcurrido.


Porque, sin ir más lejos, la anunciada sexta ola de la pandemia ocasionada por el coronavirus ha alcanzado durante estos días cifras récord de contagios en nuestro país y, en particular en nuestra provincia, debido a esa nueva variante conocida como ómicron, de un enorme poder de transmisión, aunque de una menor letalidad a decir de los expertos.  Y que, al haberse producido justamente durante estas fechas de Navidad, donde de común existe una mayor interrelación personal, ha ocasionado un sinfín de restricciones –cuando no anulación de facto- en muchos de los actos y celebraciones ya programadas.  Lo que ha provocado una serie de contestaciones y rechazos de las medidas en muchos colectivos de la sociedad que, al final, de una o de otra manera hicieron caso omiso de las medidas restrictivas y se embarcaron en celebraciones tumultuosas y donde el riesgo de propagación del virus fue real.  Ocasionando luego, a renglón seguido, un muy significativo aumento de las cifras de contagio de la enfermedad que ha batido cualquier previsión al respecto.


Pero no ha sido solamente ese aumento de los casos de coronavirus, lo negativo en estos días; porque, refiriéndonos sólo a nuestro ámbito más cercano, hay que decir que ha sido excesivo el número de sucesos con pérdidas de vidas humanas acaecidos aquí a nuestro lado, pero de una forma imprevista.  Pues varias de estas defunciones correspondieron a personas que fallecieron solas en sus domicilios; llamando poderosamente la atención de la población, que no quiso pasar por alto el hecho de que justamente ocurriese esto en Navidad, cuando son días de mayor acercamiento y convivencia familiar.


Así que navidades agridulces las vividas este año por aquí. Claro que con la esperanza firme de que en este recién estrenado año 2022, podamos alcanzar la ansiada normalidad en nuestras vidas.

 

 (Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 12/01/2022)


 


miércoles, 5 de enero de 2022

Día de Reyes

 


En otras circunstancias, esto es, libres de pandemias y de todo lo que arrastran consigo, estarían hoy nuestros pueblos y ciudades con sus calles de bote en bote, llenas de gentes presurosas de acá para allá tratando de ultimar las últimas compras, entre las que se encontrarían los regalos para familiares y amigos cara al día siguiente, festividad de los Reyes Magos.


Y, sobre todo, con los más pequeños de la casa nerviosos y a punto de no poder contenerse más y estallar con la emoción desbordada ya por completo, esperando a pie de calle la llegada de sus Majestades a bordo de sus lujosas carrozas y en los momentos previos al paso de la cabalgata que les conduce hasta su pueblo o ciudad cargados de regalos. 


Pero como la situación es muy otra y estamos como estamos, aunque la emoción y el nerviosismo de la grey infantil no faltará en ningún momento, el revestimiento de la llegada de los Magos de Oriente, unido a toda su pompa y lujo a bordo de majestuosas cabalgatas, se verá drásticamente mermada –cuando no suspendida de facto-, como consecuencia de esta pandemia que nos asola y que, justamente en estos momentos, marca cifras de contagio de auténtica preocupación.


Así que las celebraciones mañana de esta llegada de sus Majestades a las casas de los más pequeños para traerles sus regalos, se harán en la intimidad de los hogares y mermadas también de personas a su alrededor.


Y pasado el día de mañana, daremos por concluidas las celebraciones navideñas de este año 2021, que han venido marcadas de nuevo por la presencia entre nosotros del virus que nos trae a mal traer.  Deseando fervientemente que este nuevo año, el 2022 que acaba de estrenarse hace unos días tan sólo, y que a diestro y siniestro en la pasada Nochevieja nos hemos deseado feliz y próspero y lleno de salud para todos, sea definitivamente el año que aparezca en los anales de la historia como aquel en el que conseguimos vencer definitivamente esta pandemia del covid-19.


¡Ojalá! sea así.  Sabiendo, además, que el trabajo para ello debe ser por parte de todos, cada uno en su cometido y observando y cumpliendo estrictamente las normas y medidas sanitarias al respecto.


(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 05/01/2022)