Tierra de Museos

 

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Palencia, sumadas la capital y la provincia, acoge a lo largo de su estirada superficie una gran cantidad de Museos de todo tipo, dejando aparte por su relevancia los religiosos y artísticos, los cuales destacan por encima de todos los demás.

Museos, esos otros, que pivotan en torno a una profesión, a un trabajo u ocupación tradicional, a algún elemento de la naturaleza, a la vida y costumbres del lugar o de algún animal de la naturaleza, al apasionante mundo de la fotografía, al mundo de las abejas, de las palomas, al de la madera y su talla artística, etc., etc.

Bien, pues dicho esto; y a raíz de ponerse en marcha el último de los museos de este tipo, por ahora, que ha sido el de las abejas en Castrejón de la Peña, me ha venido a la mente la gran diversidad de museos establecidos a todo lo largo y ancho de nuestra provincia tocando algunas de las temáticas antes descritas.

Y así, en un rápido repaso por algunos de ellos, con denominación del nombre y la localidad donde se ubican, estaríamos hablando, por ejemplo y sin abarcar la totalidad de los mismos, del Museo del Agua en la capital, el Museo de la Medicina de Ampudia, el Museo Agrícola y Etnográfico de Autilla del Pino, el Museo del Cerrato en Baltanás, el Museo de la Minería de Barruelo de Santullán, el Museo astronómico San Pedro Cultural de Becerril de Campos, la Casa Museo del General San Martín en Cervatos de la Cueza, el Museo Chino de Cervera de Pisuerga, la Casa Museo de los Títeres de Paredes de Nava, el Museo de la Olmeda de Saldaña, el Museo y Centro Temático del Palomar de Santoyo, el Museo de Herminio Revilla en Villabellaco, el Museo de la Radio de Villaluenga de la Vega, el Museo del Canal de Castilla en Villaumbrales, entre otros muchos más.

A los que habría que unir por su similitud, los Centros de Interpretación del Geoparque de las Loras en Aguilar de Campoo, de la Montaña Palentina en Cervera de Pisuerga, del Cangrejo de Río en Herrera de Pisuerga, del Bisonte en San Cebrián de Mudá, y alguno más que, por el espacio de esta crónica, se nos quedará en el tintero, pero que igualmente representan a la provincia palentina.

(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 27/10/2021)

 

 

Emblemática y atractiva Calle

 

Otro de los atractivos –uno más-, de los que goza nuestra imponente y tantas veces nombrada Calle Mayor Principal, es que a lo largo de su recorrido acoge muchos de los días a aquellos artistas callejeros que, con su espectáculo para una estancia corta de uno a tres días, recalan en nuestra ciudad para ofrecer a los palentinos su saber hacer en amplias sesiones de mañana y tarde, y así poder sacarse como recompensa, aparte de los aplausos, un dinero que, a buen seguro, les servirá como ayuda en su sustento.

Y se puede apreciar su presencia en diferentes épocas del año, no sólo durante la semana grande de nuestras fiestas patronales, como ocurría años atrás; aunque coincidiendo básicamente con el tiempo de mejores temperaturas en la ciudad, por razones obvias.

Algunos de los días, recorriéndola de principio a fin, uno se puede encontrar con hasta tres o cuatro artistas diferentes, con espectáculos bien distintos: virtuosos de la guitarra, bien eléctrica bien clásica –añadiéndole incluso su voz muchos de ellos-, expertos marionetistas con un amplio dominio del entretenimiento de las marionetas, finos acordeonistas interpretando dulces melodías, entendidos del violín, pequeño grupo de músicos, selectos malabaristas…   

 

Y ello sin contar con la presencia casi obligada en alguno de los tramos de otro artista que merecería una reseña especial, que es el caso del músico inglés John Fellingham, que lleva entre nosotros, amenizando musicalmente los paseos de los palentinos a lo largo de la Calle Mayor, tanto de mañana como de tarde, la friolera de veinte años, y a cuyo rostro ya nos hemos acostumbrado a ver, por lo que bien se le puede considerar ya palentino de adopción por derecho propio.  Y que como violonchelista consumado que es, ha sido llamado por diferentes instituciones culturales para varios conciertos a lo largo de los últimos años.

Todo un amplio espectro de artistas dejando su talento artístico entre nosotros, con los que uno se puede encontrar cualquier día del año mientras saborea un muy agradable paseo a lo largo de esta emblemática y atractiva Calle Mayor Principal.

(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 20/10/2021)

 

 

 

Noticias positivas

 

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De vez en cuando, en esta apasionante tarea de contar las noticias que van sucediendo día a día en el mundo y que van saltando a los medios de comunicación, ocurre que, a pesar de que la mayoría de ellas sean de un cariz trágico y, por ello, negativas; hay en alguna gozosa ocasión, que la noticia que se refleja en estos medios es amable, buena y, por tanto, positiva.

Hoy, en este espacio semanal de actualidad, quiero desarrollar algunas de estas noticias agradables que gusta contar, y también recibir por parte del lector.

Bien, pues la primera de ellas, nos habla de una mujer palentina –Laura Román Rivas-, que triunfa en el mundo en el ámbito de su profesión –Ingenierías Agrarias-. Y que su exitoso currículum laboral en el ámbito mundial de la investigación agraria y de los alimentos, le ha llevado a recibir en estos días el Premio de la Unesco como una de las tres mujeres de mayor talento emergente en el mundo científico de la investigación en este campo.  Y resultaba gratificante estos días ver la foto de esta palentina por el mundo recibiendo este premio.

La segunda de estas noticias en positivo, va de “Cristos”, pero no se asusten, que no es porque se haya “armado algún Cristo”, no. Porque la noticia es que la ciudad de Palencia se va a hermanar con la ciudad de Río de Janeiro, allá en Brasil, por el hecho de tener ambas ciudades en su ámbito la respectiva estatua de Cristo de mayor altura del mundo. Y ahí anda nuestro Ayuntamiento estudiando y plasmando por escrito los pormenores de este hermanamiento que, a la postre y por lo que a nosotros nos toca, servirá de revulsivo para que más personas, si es que no lo conocían, muestren interés por acercarse a visitar nuestro Cristo del Otero.

Y la tercera y última que quería resaltar, sería la relativa a que poco a poco, con pies de plomo eso sí, parece que vamos levantando cabeza del tema de la pandemia, encaminándonos a una normalidad todavía un tanto relativa, pero que lleva camino de asentarse definitivamente. Ojalá sea así y, establecidas las pautas correspondientes, todo quede en el recuerdo de un mal momento pasado; eso sí, duro, muy duro.

(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 13/10/2021)

 

 

 

Catástrofes naturales

 

                                                                        Foto (Internet)

Pues a juzgar por lo que nos viene rodeando últimamente en plan catástrofe y demás, uno bien pudiera hacerse de pronto más de una pregunta del tipo: ¿Y cuál será lo próximo que sucederá en plan desastre en nuestro alrededor en los próximos meses?. Seremos capaces de aguantarlo?, lo superaremos y saldremos de ello con bien?; o resurgiremos de entre las cenizas como el ave fénix?.

Porque con toda razón, luego de vivir lo que en cuanto a calamidades y tragedias naturales estamos viviendo en estos últimos tiempos en espacios y lugares diferentes de este nuestro mundo, es perfectamente asumible que nuestro pensamiento un buen día pueda echarse al campo y comenzar a elucubrar por aquí y por allá sobre cuál será lo próximo que nos pueda acontecer, de seguir esta cadena de fatalidades y desgracias que nos están cayendo cual si fueran las siete plagas de Egipto.

Y es que ya me dirán ustedes, si no, la serie de tragedias y desastres naturales a los que estemos asistiendo últimamente a todo lo largo y ancho de este mundo nuestro; con especial fijación en los que, por proximidad, nos resultan más dolorosos y con los que podemos empatizar más.

Ahí está en el recuerdo de todos esta pandemia sanitaria del covid-19, que aún pende sobre nuestras cabezas porque aún no hemos conseguido vencerla en su totalidad. O esa erupción tan desaforada y tan trágica –aunque afortunadamente sin pérdidas humanas- del volcán de la isla de la Palma en estos últimos días. O la sucesión de terremotos que recorren de forma recurrente los cinco continentes, con incidencia también en nuestro país. O esa serie de inundaciones que vienen afectando cada vez con más contundencia a diferentes zonas del planeta, y que en nuestro espacio peninsular e insular dejan también su huella. Y así sucesivamente con otras adversidades que siembran la destrucción y la devastación allá por donde pasan.

Así las cosas, cabría pensarse que qué habremos hecho mal los terrícolas para merecernos esto.

Claro que, hilando hilando, llegamos quizás a la madre del cordero cuando advertimos que lo del cambio climático puede que tenga algo –o mucho- que ver con todo esto.

(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 06/10/2021)