miércoles, 21 de octubre de 2020

Oscuro panorama

Con este panorama sanitario tan difícil, y 

los arreones de unos contra otros y todos

contra todos en el plano político.... 


Con el otoño muy vivo todavía en nuestro día a día y a punto ya de pasar por el cada vez más discutido cambio de hora para encarar el conocido como horario de invierno –este próximo domingo 25, donde a las 3 de la madrugada los relojes han de marcar las 2-, estamos viendo cómo la zarpa del coronavirus de marras no deja de atacar por todos los flancos, sumando positivos en la cuenta particular de quien lo padece y en la oficial de las autoridades sanitarias, que se las ven y se las desean para controlar la enfermedad              y minimizar los efectos en la sociedad en la manera de lo posible, a pesar de las diferentes medidas que se vienen tomando.


Con este panorama sanitario tan difícil, y los arreones casi a diario de unos contra otros y todos contra todos en el plano político, donde los enfrentamientos tanto de ideas como de métodos de convencimiento político entre los partidarios de los unos y los de los otros, están cada día a la vuelta de la esquina y sin ninguna mínima posibilidad de acercamiento de posturas, nos está quedando un país de obligada necesidad de pase por chapa y pintura.


Y si no, no hay más que asomarse cada día a las informaciones de prensa, radio y televisión, para comprobar que ya no se habla ni se escribe de otros temas que no sean los antes citados. Y, además, combatidos con una inusitada virulencia verbal por parte de cada una de las formaciones políticas en la mayoría de las sesiones parlamentarias de los últimos meses.


Y eso sin hacer mención a la realidad económica que va complicándose por momentos, y que nos está asfixiando a marchas forzadas, con unas perspectivas de recuperación efectiva a varios años vista según los expertos.


Porque, además, los fondos europeos aprobados para paliar en buena parte las inversiones y los esfuerzos económicos realizados por los países como consecuencia de esta pandemia, aún no se conocen las fechas de su efectividad práctica.  Con lo que, si no se quiere que el país se paralice, el recurso que le queda al gobierno de manera continua es el endeudamiento cada vez mayor de las arcas financieras del estado.



(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 21/10/2020)



 

 

 

 


miércoles, 14 de octubre de 2020

Confinados de nuevo




Pues va a ser que, por mor del escenario en el que nos estamos moviendo y viviendo día a día últimamente, no cabe otra que volver a hablar del maldito coronavirus de marras –si es que hubiésemos dejado de hablar de él desde siete meses para acá, claro; que me temo que no-. 


Y es que ya ven que por lo que más cerca nos toca, y a la vista de los datos que arrojamos los palentinos y que analizan las autoridades sanitarias al respecto, a la capital palentina se nos ha vuelto a confinar durante catorce días –confinamiento perimetral, lo han llamado-, como consecuencia de haber sobrepasado los parámetros establecidos para una evolución considerada como normal con respecto a esta pandemia del covid-19 que estamos padeciendo.


Y claro, llegados a este punto, cabría pensarse que los números son sólo eso, números; pero las cifras, aunque sean de por sí frías, cantan por sí solas y nos sitúan donde nos sitúan en la escala elaborada a tal fin. 


Lo cual no quiere decir que el personal no ande cabreado y trayendo a colación en conversaciones a nivel de calle el tan manido comentario –pero no con cierta lógica y razón-, de que aquí “estamos pagando justos por pecadores”.  Y a continuación, para abundar aún más en su certera apreciación, detienen el paso, echan mano de la memoria y ponen de manifiesto multitud de ejemplos en los que se aprecia bien a las claras la serie de incumplimientos por parte de unos cuantos de las normas sanitarias mínimas así establecidas; que luego traen como consecuencia situaciones padecidas no deseadas, como esta del confinamiento.


Y, aunque este aislamiento o encierro perimetral actual, resulta ser en la práctica más blando que el padecido en los meses de marzo y abril pasados, no deja de surtir inconvenientes de todo tipo en nuestra movilidad más allá de los límites capitalinos, tanto en las entradas como en las salidas de la capital; lo que repercute también, ineludiblemente, en la actividad económica de la capital y la provincia, ya de por sí mermada.


Al final, por supuesto, uno hace una reflexión y piensa que, de manera general, se puede contribuir mucho más a la erradicación de esta pandemia.


(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 14/10/2020)


 

 

 

 



miércoles, 7 de octubre de 2020

Octubre y último trimestre

y en nuestras manos tenemos también algún grado de responsabilidad en orden a la positiva evolución de esta pandemia...
 



Esto de entrar en el último trimestre del año, de común –y me refiero a antes de iniciarse esta pandemia, que nos está azotando sin piedad-, significaba de alguna manera una alegría por haber logrado llegar a casi el final del año, y con la mirada puesta en las inminentes fiestas de Navidad, que ya comenzaban a anunciárnoslas en las grandes y pequeñas superficies comerciales con la puesta a disposición de los clientes de los productos propios de esas fiestas.


A lo que se unía un cierto movimiento del personal en las calles de las ciudades, motivado por las compras propias de esta época del año, lo que propiciaba una cierta carga de alegría en el ambiente general de la ciudad.


Pero, contra todo pronóstico –y si no, acordémonos de cuando al finalizar el año pasado nos deseábamos todos mucha salud (aquí está la clave) y un feliz y próspero 2020-, muy pronto, sin embargo, vino a visitarnos, sin llamarlo y para quedarse, este malvado coronavirus, que nos está haciendo sufrir lo indecible, amén de poner en solfa la estructura económica del país.


Con lo que, haber llegado hasta aquí en unas condiciones aceptables, eso sí con el montón de restricciones debajo del brazo que estamos padeciendo, puede ser hasta motivo de alegría y de agradecimiento –y aquí cada cuál explicite a quién o a quiénes-.  Lo cierto es que, principiándolo como estamos, aún no sabemos cómo transcurrirá este último trimestre del año.


¿Habrá celebraciones navideñas tal y como las hemos pasado siempre?. ¿Se colocarán en las principales calles los vistosos arcos de luz de estas fechas?, aunque haya municipios como el de Vigo, que ya nos ha tomado la delantera, si acaso. ¿Podremos escuchar los tradicionales villancicos interpretados por grupos de voces en actuaciones de conjunto?. ¿Podremos acudir a las iglesias sin ninguna limitación para seguir los actos religiosos?.


¿O se programarán unas sucedáneas “no fiestas de Navidad”, tal como pasó con las patronales de meses atrás?.  En cualquier caso, recordemos que en nuestras manos tenemos también algún grado de responsabilidad en orden a la positiva evolución de esta pandemia y acortando su propagación. 


(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 07/10/2020)


 


miércoles, 30 de septiembre de 2020

Septiembre y seguimos



Y, desde luego, si se nos anunciase de una manera inequívoca la llegada de la correspondiente vacuna...







Cerramos hoy este mes de septiembre con el corazón constreñido y encajado casi en un puño; inquietos y a la vez expectantes ante el giro que pueda tomar en las próximas fechas esta pandemia mundial provocada por el maldito coronavirus de marras, que nos trae a mal traer desde hace ya más de siete meses, y que está acabando con cualquier sistema organizativo al uso que viniese rigiendo en los países, sean estos del norte, del sur, del este o del oeste, y con capacidades económicas más o menos desarrolladas; porque a todos ataca el virus en cuestión.

 

Un mes de septiembre que bien hubiésemos querido se hubiese desarrollado de otra forma bien diferente; con su vida de relación habitual y ordinaria, su prosperidad económica avanzando, su tiempo para el trabajo y para la diversión sin cortapisas, sus fiestas patronales y sus romerías votivas y cercanas y en olor de multitudes. Y no con estas “no fiestas” que, en lugar de las originales, se han ido programando con la mejor de las voluntades, y prodigando por doquier de una manera paralela.  Aunque no hayan faltado quienes, a su abrigo, se hayan saltado todas las normas de restricción y seguridad pactadas.

 

Y a consecuencia de ello, estemos sufriendo ahora en buena medida una serie de rebrotes del virus en diferentes escenarios, que nos han conducido al establecimiento de una serie de medidas restrictivas aquí en Palencia.

 

Así las cosas, no se augura un otoño tranquilo y sereno en nuestra vida ordinaria; porque sobre nuestras cabezas, en cada uno de los pasos que ejecutemos, penderá esa constante espada de Damocles del virus, que nos obligará a actuar de una manera diferente a la que debiera ser la habitual.


Y claro, tampoco el de su inmediato seguidor, el invierno donde, además, nos encontraremos con los agravantes de los catarros, los fríos y las gripes típicas de esta estación, que complicarán la situación.

 

Un negro panorama, en fin, que dejaría de serlo en parte si, todos y cada uno de nosotros, cumpliésemos a rajatabla las normas establecidas para frenar al virus.  Y, desde luego, si se nos anunciase de una manera inequívoca la llegada de la correspondiente vacuna.


 (Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 30/09/2020)

miércoles, 23 de septiembre de 2020

Saldaña, la Plaza Vieja

 
 

Uno, que es oriundo de la Comarca saldañesa y, desde siempre, ha tenido a la localidad de Saldaña como referencia, no puede por menos que alegrarse y admirar cómo luce su tradicional y emblemática Plaza Vieja desde hace unas fechas, después de las obras de restauración y rehabilitación llevadas a cabo en la misma y en todo su Conjunto Histórico, que han estado sufragadas con cargo al famoso 1,5 cultural del Ministerio del ramo, la Diputación Provincial y el propio Consistorio saldañés.

 

Queda fuera de toda duda la importancia de este enclave urbano de la localidad para todos los habitantes de la villa y las localidades aledañas a  Saldaña, que aún siguen conservando en su haber semanal un evento extraordinario para la Comarca, cual es el famoso mercado de los martes. Que en tiempos pasados tenía lugar precisamente en esta Plaza.

 

Y que posteriormente, andando los años, al sacarse de ella este mercado –aunque aún se lleven a cabo algunas de las transacciones comerciales del grano y las leguminosas-, va a quedar reservada para eventos de carácter especial como pueda ser el famoso “mercado romano” que cada año se organiza en la localidad, el ocio y la hostelería en general.

 

Y para el paseo sereno y tranquilo bajo sus soportales de madera, que han sabido conservar su encanto y sabor antañón tras el paso del tiempo.  Y que es, justamente, el aspecto que más destaca en el entorno, proporcionándole su entrañable y vetusta estampa.

 

Una Plaza, declarada Conjunto Histórico Artístico que, como ha quedado remarcado ampliamente, goza en su haber del privilegio de haber servido como marco de la primera corrida de toros documentada, con motivo de una boda real allá por el siglo XII.

 

Y una Plaza, también, que, si ya gozaba de la prerrogativa de ser un espacio emblemático de la localidad, ahora tras su rehabilitación, ha ganado en prestancia en cuanto al conjunto de sus elementos, favoreciendo la calidad de vida de sus habitantes, fomentando de esta manera la actividad económica y de ocio de la localidad.   Generando, a su vez, un mayor incremento de visitantes, que querrán pasear bajo sus soportales y recorrerla en cada uno de sus rincones.

 

 (Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 23/09/2020)

 

 

 
 
 

 
 

miércoles, 16 de septiembre de 2020

Desandar el camino

 
 

En breves fechas, regresarán a sus diferentes lugares de procedencia, si no lo han hecho ya en gran medida, el grueso de los veraneantes que este año decidieron pasar sus vacaciones de verano en los distintos enclaves rurales de nuestra provincia.  Por lo que en esta ocasión, hemos visto cómo se han batido, en cuanto a récords, todas las marcas habidas y por haber, debido al coronavirus de marras; que hubiera hecho que muchos de estos visitantes de nuestros pueblos, con otra situación diferente en el orden mundial, hubiesen elegido otros destinos ajenos a estos pagos rurales.     

                                                                                                                                                          

En un verano, éste que, a excepción del calor, que ha apretado de lo lindo, ha resultado atípico de manera general como consecuencia de estar atravesando por esta pandemia sanitaria de todos conocida, que está repercutiendo en el devenir constante de nuestras vidas desde hace ya más de seis meses, y lo que ha de venir hasta tanto en cuanto se dé con una vacuna lo suficientemente eficaz para que, entonces sí, podamos decir que hemos acabado con el dichoso virus.

 

El caso es que nuestros pueblos han servido de refugio seguro durante estos meses fuertes del verano a estos cientos de visitantes que han hecho turismo por nuestra provincia, y se han preparado por si las cosas vienen mal dadas y la situación sanitaria se complica mucho más.

 

Total que, en breve, cuando canten de nuevo los grillos en la noche, tras esconderse el sol por entre los muros de la iglesia y la tapia de alguna edificación próxima, tomando el cielo las tonalidades más vistosas, ya nadie prácticamente les molestará, porque apenas si quedarán en el lugar los últimos habitantes más longevos. 

 

Eso sí, en cada una de estas zonas quedará guardado y cerrado, de momento a cal y a canto, el refugio seguro al que huir si las cosas en los grandes núcleos de población se tornan difíciles por culpa del susodicho coronavirus.  Que una vez puede que sí nos pille el confinamiento entre cuatro paredes; pero dos ya no, teniendo aún la vieja casa del pueblo.

 

 

                 (Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 16/09/2020)

 

 

  

 


miércoles, 9 de septiembre de 2020

Algo se mueve

Todo un cambio de roles inmediato para estas mujeres, fotografiadas en bata...








De vez en cuando, surgen noticias enmarcadas en nuestro mundo rural, que parecen como si de pronto sirviesen para espolear a las gentes del lugar y las hiciese sentirse más vivas, sacándolas de la rutina y la pasividad de los días.
 

Es el caso de un pequeño pueblo de nuestra provincia, Villarmienzo, próximo a Saldaña, que ha visto cómo de un día para otro su nombre ha comenzado a salir en las noticias y medios de comunicación provinciales y nacionales, amén de comenzar a dejar huella en las redes sociales de nuestros días, por una acción emprendedora de una persona vinculada a la localidad.
 

Aunque sobre todo, en lo relativo a un grupo de mujeres rondando la edad de 80 años de este pueblo palentino de apenas 40 habitantes, que han sido las verdaderas protagonistas de un trabajo fotográfico bajo el significativo título de “Tributo a la bata”, de la fotógrafa Lucía Herrero, con ascendientes en la localidad.
 

Sí, así como suena, leyeron bien, a la bata, esa prenda de vestir tan de las mujeres de nuestro medio rural, a las que tantas veces hemos visto vestirla, y que ahora el trabajo de esta fotógrafa ha elevado de categoría, al ser esta la prenda con la que aparecen fotografiadas ese grupo de mujeres de esta localidad en diferentes escenarios y ambientes rurales del pueblo.
 

Todo un cambio de roles inmediato para estas mujeres, que han pasado así de vivir en medio de una rutina diaria en el entorno del pueblo, mimetizándose casi con el paisaje, a mostrarse mucho más vivas y activas e incluso jugar con la cámara y buscar su lado más atractivo.
 

Fotografías las de este trabajo, que van a ser expuestas en diferentes lugares del mundo y que podrán adquirirse también a través de una página web creada al efecto.  Así que los rostros de estas mujeres de Villarmienzo, vistiendo su característica bata en ambientes rurales varios, viajarán por el mundo, y en algún lugar remoto distante cientos de kilómetros de la localidad, quizás alguien pueda colgar alguna de estas fotografías en alguna de las paredes de la casa.
 

Toda una realidad del mundo global de hoy, que seguro hizo felices a estas mujeres de Villarmienzo fotografiadas en bata en su pueblo.
 
 
(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 09/09/2020)