El calendario nos sitúa todavía este miércoles –y muchos más días que
vendrán sin duda-, en las postrimerías o las horas inmediatamente
posteriores a la celebración de la consulta electoral del pasado domingo para
elegir a los representantes en los municipios y en la Comunidad Autónoma. Y la
resaca postelectoral de estos días, tras una campaña bastante reñida de los
candidatos intentando atrapar hasta el último de los votos posibles en el
último rincón de la provincia, es tiempo propicio para analizar resultados,
buscar estrategias, indagar pros y contras y, a la postre, propiciar alianzas,
en el caso de ser necesarias, cara a establecer la gobernabilidad de las
Instituciones.
Entretanto, en el ambiente atmosférico, parece que la ola de calor tan
excesivo que se nos coló por aquí unas semanas atrás, desapareció casi de un
día para otro, dejando paso a unas temperaturas quizás más acordes con estas
alturas del año.
Si bien, parece que, entre cambio y cambio, hemos dejado un tanto
entreabierta la puerta por donde desfilan las corrientes de aire, y se nos ha
colado de rondón, como el que no quiere la cosa, un viento callejero y helador
a grandes rachas que, además, cimbreaba con inusitada insistencia las copas de
los árboles, vestidos ya de abundantes hojas cara a la nueva estación.
Y que a nivel del suelo, ha contribuido a refrescar las mañanas de manera
considerable. Aunque visto el día a
través de los cristales y con el sol bien presente, el panorama exterior
pareciese muy otro por momentos, producto del engaño visual de la realidad que
habitaba tras los cristales.
Claro que, entre una cosa y otra, los palentinos, a la hora de salir a la
calle este último fin de semana, estuvimos de suerte; porque pudimos
diversificarnos en nuestras apetencias y elegir entre una multiplicidad de
actos y actividades varias; pues no en vano estábamos de fiesta.
Que, aunque fuesen pocos días, porque de nuestra “Feria Chica” se trataba
en realidad, no por ello hubo escasez en los actos y déficit a la hora de
buscar la diversión, sino al contrario; queriendo intuirse tal vez el verano y
la semana grande de nuestras fiestas de San Antolín.
Y así, como hubo su tiempo para acudir al colegio
electoral, hubo también su tiempo para salir a pasear. Pero a la par, sin olvidarnos
de la fiesta, que también tuvo su tiempo para sacarle su jugo y comenzar la
semana en forma y de buen talante.
(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 27/05/2015)