En lo que pasan apenas tres días más, y nos encontraremos –muchos dirán
quizás que sin comerlo ni beberlo-, iniciando a una velocidad casi de vértigo
un nuevo mes de nuestro calendario, el mes de marzo del que, según apunta
nuestro refranero popular, no debemos fiarnos en exceso porque es traidor, pues
tan pronto hace frío como calor…
Pero lo haremos los palentinos consternados todavía y, por ello, no
repuestos del todo, del fuerte “mazazo” que nos supuso conocer a primera hora
de la tarde del pasado domingo 15 de febrero, el repentino fallecimiento de
nuestro Presidente de la Diputación, D. José María Hernández; hombre muy
querido y respetado en nuestro ámbito provincial, como lo puso de relieve su
multitudinario velatorio y su posterior misa de funeral.
Mas como la vida continúa, andamos también ahí, en una conjunción de
energías, tratando de “empujar” con
todas nuestras fuerzas al invierno (no nos dejes hacerlo solos, ¡únete!..),
para tratar de alejarlo de nuestros límites territoriales más pronto que tarde.
Que, por lo que a este año respecta, ya nos ha dejado por estos lares
suficientes muestras de su crudeza manifiesta, con inconvenientes sobrevenidos
para dar y tomar, y contar y contar sin parar en casi todos los rincones de
nuestro norte provincial.
Que ya tenemos por bien comprobado, este año más que otros, que por mucho
que parezca o se insinúe solamente, al invierno nunca “se lo come el lobo” (por
mucha hambre que tenga, pudiera añadirse). Aunque en esta ocasión, el hambre
haya de presuponérselo a él y a otros muchos animales del campo, por aquello de
que la nieve viene cubriendo durante muchas jornadas seguidas los que son sus
dominios habituales y su hábitat natural.
Así que, si aunamos nuestra fuerza mental y
apuntamos todos en una misma dirección, igual hasta conseguimos que el invierno
nos resulte menos invierno… O ya, llevándolo a un extremo mucho mayor, ocurra
que mientras estamos ocupados en ello, dejemos volar por momentos nuestra
imaginación y “aterricemos” mentalmente en un valle cualquiera de nuestra
montaña palentina en un tiempo posterior al 20 de marzo, cuando la primavera
comienza ya a despuntar y la belleza del paisaje nos envuelve de la mañana a la
tarde. Eso sí, sin que la nieve aparezca ya más que en las cumbres mismas de los picos más
altos.
(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 25/02/2015)
Buen recuerdo para el Presidente de la Diputación palentina, digno de merecer, y una pena su tan temprana marcha por fuerza de enfermedad, que no le dejó seguir desempeñando su trabajo, que se lo llevó, sin más nada.
ResponderEliminarY, el tiempo de nieves, tendría que pensarse antes de venir a visitarnos, que somos de armas tomar y a la próxima le vamos arrear por donde osó asomarse.
La primavera...ay... la primavera de estas latitudes, es fiera, terrible y más bien parece "la madrastra de Blancanieves" por qué, no sabe comportarse, yo diría que la Primavera es el Invierno del Verano, por qué, nos congela y no se quiere ir hasta ya entrado el verano.
Vamos a tener que AUNARNOS todos al completo, como bien dices, J. Javier, así se lo rumiará mucho mejor y este año podría venir con algo más de humildad y darnos la alegría de regalarnos "una Primavera" más cálida... ¡Quién sabe, a lo mejor lo logramos!
Un abrazo, Mía
Me gustan tus palabras, Mía. Has plasmado muy bien los distintos planos de mi artículo. Del que, particularmente, me quedaría con el último de sus diferentes párrafos.
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo,