miércoles, 28 de mayo de 2014

Y LA LLUVIA NOS VISITÓ


Bueno, pues parece que tras las muchas peticiones y prédicas al respecto que el Santo patrono de los agricultores ha recibido de estos y por estos lares durante los últimos días, encaminadas todas ellas a lograr su intercesión para que a la mayor brevedad las nubes que marchan sobre nuestras cabezas se “abriesen” sin demora y, generosamente, descargasen sobre nosotros su parte alícuota de lluvia, esto es, tirando más a mucha que a poca; por lo que se ve, el Santo en cuestión ha atendido prontamente estas demandas un año más, y ha intervenido de una forma decidida para que esa agua tan necesaria llegase a nuestros campos, como así lo ha hecho durante los últimos días.

Bien, pues así las cosas, y tras un tiempo de corretaje para realizar las oportunas valoraciones a pie de campo sobre si la cantidad de precipitaciones recibidas por nuestras tierras, han sido de momento suficientes o debían haberse recogido muchos más litros de este líquido elemento para una mayor reserva en el subsuelo y un mejor aseguramiento de las cosechas; lo que toca ahora es esperar a que esta agua que ha regado nuestros campos, es de esperar que a tiempo todavía, ejerza sobre ellos su benéfica acción y los frutos granen con total normalidad.

Eso sí, recordando a quien pueda acogerlo, que seguro no será otro que el tan repetido Santo, que no obstante lo anterior, no se olvide de que quizá de aquí a unos días, se precise de nuevo de su intercesión por aquello de aquilatar en su punto definitivo las cosechas, y envíe de nuevo a nuestros campos un pequeño recordatorio en forma de lluvia; pero bueno, eso sólo si acaso, porque tampoco es cuestión de andar con la pedidera siempre en la boca…

Y es que, estos días, con tanta necesidad como había, que nuestros campos estaban ya completamente sedientos después de tanto tiempo sin recibir ni una sola gota de agua, hasta se abrían con ganas los paraguas en respuesta a la lluvia que caía, cual oro en polvo. 
 
Y no sé yo si algunas gentes en algún lugar, llevadas por la animación, no habrán tratado de representar, en plan “amateur” claro, alguna de las escenas de aquella famosa película llamada “Cantando bajo la lluvia”, donde el actor Gene Kelly protagonizara algunos momentos de cine impagables, que han quedado perpetuados para siempre en nuestro recuerdo.

(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 28/05/2014)
 

miércoles, 21 de mayo de 2014

CON LOS RUEGOS AL SANTO


Después de un adverso y triste martes y trece, aunque si bien, el verdaderamente aciago y desventurado fuese su vecino e inmediato anterior, lunes doce, por aquello del terrible y vil asesinato en la persona de la que fuera presidenta de la Diputación Provincial de León; llegó el jueves quince y las tornas parecieron cambiar de pronto por mor de la celebración de la festividad de San Isidro Labrador, patrono de los agricultores y gentes del campo en general.

Y así en la práctica totalidad de nuestros núcleos rurales, pero sobre todo en aquellos que le tienen como patrón y al que invocan cada año por estas fechas con una fe y una fuerza especial, demandando un campo sano y fértil, los festejos programados a tal fin dieron paso a la alegría por unos días o por unas horas, al menos; que la pena es de cada cual y viene y va.

Claro que, con una espinita clavada y una petición más para el Santo: agua con generosidad para estas tierras en estas fechas, ya que la mayoría de los campos parece que adolecen en estos momentos de ese líquido elemento y andan un tanto sedientos agotando las reservas del subsuelo, y con una perspectiva bastante floja en cuanto a un aporte supletorio con los habituales riegos de estos meses, pues las reservas hídricas no es que anden tampoco demasiado boyantes.      

Por eso, durante esos días de fiesta, y algunos más que te rondaré morena, entre juego y juego de los propios del lugar, o entre baile y baile, se escapaba una miradita al cielo por si la presencia de la lluvia podía intuirse próxima y el Santo obraba un nuevo milagro.

Que así lo demandó en su plática el cura del lugar en misa mayor, minutos antes de organizarse la tradicional y solemne procesión, con danzantes incluidos, por las principales calles del pueblo y algún campo limítrofe, que recibiría de manos del sacerdote la oportuna bendición al pie mismo del cultivo, con una pretensión generalista y por extensión para el resto de los sembrados de los alrededores, tanto los próximos como los más lejanos.
 
Así que, llegados a este punto y tras el final de los festejos en honor de este Santo tan querido, habiendo vuelto ya cada mochuelo a su olivo, las buenas gentes del campo confían en su intercesión para que llegue pronto esa lluvia tan implorada estos días.
 
(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 21/05/2014)
 

miércoles, 14 de mayo de 2014

CON LAS CAMPANAS AL VUELO


La verdad es que hace unos días Palencia sonaba a fiesta grande y a festejo de gala en una mañana refulgente de luz, aunque el hecho ocurriese en la tarde-noche y la luz del día estuviese ya declinando.

Y sonaba también a función de pueblo celebrando de forma solemne su fiesta mayor, procesionando por las calles a su santo patrón, entre el repicar alegre y constante de las campanas de la iglesia.

Así podía percibirse por momentos nuestra capital días pasados, tras escucharse en toda la ciudad un continuado repicar de campanas, desde nada más y nada menos que ocho iglesias capitalinas, sonando al unísono desde las 9 de la noche, una hora que todavía convocaba a bastante gente en la calle.

Que comenzaban a preguntarse qué pasaba en la ciudad, que de pronto y a una hora, cuando menos inusual, un número indeterminado de campanas de distintos templos se habían vuelto un tanto “locas” y no cesaban de tañer y tañer en una conjunción de sonidos muy familiares que convergían desde diferentes puntos de la ciudad, retumbando con fuerza contra los edificios de aquí y de allí y saliendo rebotados calle arriba o calle abajo hasta perderse tranquila y mansamente en su final; pero a los que les seguían los ecos de nuevos redobles, y a éstos otros…; y así sin solución de continuidad durante un tiempo en torno a los quince minutos.

Pero muy pronto, por los comentarios de unos y de otros, el que más y el que menos pudo tener conocimiento cierto sobre el motivo de aquel continuado repicar de campanas, y el pequeño entuerto del principio se deshizo por completo.

Ocurría, digámoslo ya, que, de esa forma tan particular, se quería conmemorar el IV Centenario de la Beatificación de Teresa de Jesús y los 400 años de su canonización como Santa, que coincidían en ese día de abril.  Pero con una circunstancia más, y era que el acto se llevaba a cabo en la totalidad de las diecisiete localidades de nuestro país donde la Santa realizara alguna Fundación, entre las que se encuentra, por supuesto, la capital palentina.
 
Todo ello, enmarcado en un más amplio programa de actos que se llevarán a cabo dentro de la iniciativa “Huellas de Teresa”, que se ha puesto en marcha con motivo de la celebración el año próximo del V Centenario de su muerte, del que nuestra capital formará parte activa.  

(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 14/05/2014)
  

miércoles, 7 de mayo de 2014

LOS QUE NOS VISITARON


Siempre que llega algún puente festivo, y mucho más si se trata de los días de Semana Santa, se intentan poner a punto todos los recursos turísticos de la provincia ante la potencial llegada de visitantes, y se hacen cábalas sobre cuál pueda ser el número de éstos; contando de entrada con una serie de determinantes previos, entre los que sin duda computan, y mucho, la época del año de que se trate y las perspectivas meteorológicas anunciadas.

Bien, pues en este sentido, las previsiones que se barajaban en cuanto a un importante incremento del turismo en nuestra provincia durante los días de la pasada Semana Santa, seguro que eran razonablemente esperanzadoras porque, al trabajo realizado en el exterior para su mejor y mayor difusión, se unía este año el que las expectativas meteorológicas se anunciaban como excelentes para los días centrales de la misma.  E invitaban por ello a salir de casa y conocer nuevas tierras, nuevas realidades y unas celebraciones religiosas muy sentidas y preparadas con todo el saber hacer que dan los años y el esfuerzo y el cariño de todos los componentes de las Cofradías.

Así que, pasados aquellos días y hecho el oportuno recuento, se comprueba cómo, en efecto, se cumplieron acertadamente las perspectivas, porque el número de visitantes en nuestra provincia durante estas pasadas fechas, que al final se manejan, resulta ser muy positivo, pues ronda la cifra de los 9.000.

Y así con ese monto global, se ha visto que casi en cada uno de los diferentes frentes provinciales con recursos turísticos susceptibles de acoger a estos turistas, la afluencia de personas se vio gratamente superada con relación al número de las recibidas en el pasado año.

Claro que hubo recursos que, por su trascendencia y valor intrínseco, tiraron con más fuerza del conjunto para llegar a estas cifras totales. 
 
Y, entre ellos, destaca sobremanera la Villa Romana de La Olmeda que, según se ha informado, obtuvo la cifra récord de 2.600 visitantes, según quedó constatado.  Le siguió en importancia por número de visitas recibidas, la Cueva de los Franceses, que fue vista por 1.020 personas.  Y así sucesivamente en cuanto al resto de lugares provinciales: barcos del Canal, Villa Romana de Quintanilla de la Cueza, Castillo de Fuentes de Valdepero...
 
Acertados estuvieron, pues, aquellos que apostaron por el turismo de interior y, en concreto, por nuestra provincia que, seguro, no se fueron decepcionados.
 
(Publicado en el Periódico "Diario Palentino" el 7/05/2014)